En 'El Usurpador', Alfredo Ángel Piccolotto nos presenta a Eduardo Cleiman, un idealista que concibe un plan audaz y arriesgado para mejorar la vida de las personas en un país marcado por la dictadura y el fracaso político. Su estrategia central es secuestrar al ministro de Economía, un acto que requiere tanto valor como una pizca de locura. La historia se desarrolla en una noche en Talas del Monte, un tranquilo lugar costero, donde los personajes evocan un pasado turbio y sus identidades parecen sacadas de un cómic. Cleiman, conocido como El Presidente, es un líder carismático que arrastra a otros con su visión, encontrando inspiración en aquello que más detesta: los símbolos de la dictadura.
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